Como vengo diciendo siempre, el curso de la danza de los gitanos egipcios es uno de mis favoritos. Por el buen rollo que crea, lo divertido que es y porque es un folclore que te ayuda a comprender un poco mejor la esencia de la danza oriental y a sacar la expresividad. Ah, y a perder el miedo a improvisar.
Y este curso lo he disfrutado especialmente por haber sido en un lugar al que tanto cariño le tengo y que hace unos meses creíamos que íbamos a perder para siempre. Gracias Pilar por recuperar El Quiñón.
si es que, donde esté un buen gitaneo...jejeje oyee que sitio más chulo por cierto, yo quiero un sitio así en Sevilla!!! ;)
ResponderEliminarGENIAL, GENIAL Y MAS GENIAL todavia, aprendi mucho y aun mas de la gente que alli habia, lo que mas me gusto sentir que un abrazo a un desconocido puede llegar a llenarte el corazon. La danza suele sacar lo mejor de nosotros mismos y Zuel por supuesto multiplica esto por diez. Llego un momento que el grupo llego a tener una fuerza increible o al menos eso me parecio a mi.
ResponderEliminarMuchas gracias a todas por estar alli, sois increibles, Zuel eres un gran maestro, Pilar gracias por tu tiempo en organizar esto.